16/3/17

Las citas intertextuales

omentamos en un post anterior el vacío que habían dejado las normas de Vancouver al deponer la actualización de la parte correspondiente a la bibliografía (Fig. 1). Y por lo menos en mi entorno he detectado que ha pasado desapercibido porque fue tanta su influencia que aún algunos autores piensan que sigue vigente o desconocen que la norma actual es la del Citing Medicine, que a su vez sigue la norma ANSI/NISO Z39.29-2005 Bibliographic References. Otra cuestión es que el despliegue de ejemplos y la profundidad que ofrece la norma desarrollada por la NLM sea cómoda para sus usuarios. 
Fig. 11 - De las normas de Vancouver (2013)
Como ya en su momento ofrecí algunos ejemplos usuales en este mismo blog lo que quería indicar ahora es que hay otra pequeña confusión con el tema del formato de las citas intertextuales, esto es las que recorren los textos publicados y remiten al número correspondendiente o a un nombre en la lista de la bibliografía que suele ir al final de los artículos. El propio Citing Medicine (Fig. 2) admite la diversidad de formato, indicando que hay verdaderamente tres estirpes posibles (por orden de aparición, por nombres de autores y por años de publicación) y apuntando sus ventajas. Pero queda bien claro que el estilo del sistema de marcas o llamadas hacia la bibliografía depende de los editores de la revista. El New England Journal of Medicine sigue el primer sistema, y en sus artículos hay un número volado o extraíndice que remite a un número de orden en la bibliografía final. Las revistas de Willey & Sons siguen el sistema nombre-año. 
Creo recordar que el Reference Manager, un gestor bibliográfico predecesor de Zotero o End-Note y Mendeley, admitía más de 400 estilos diferentes. Esos estilos afectaban la presentación de las citas intertextuales y también la ordenación de los elementos dentro de cada cita bibliográfica. El enorme parecido entre muchos de los estilos es tan desconcertante que parece inimaginable que la tendencia resista mucho tiempo más. Además de que no facilita la admisión de manuscritos, algunos de los cuales son ofrecidos consecutivamente a varias revistas, parece que no debería diversificarse tanto algo sobre lo que se han hecho tantos esfuerzos de normalización.
Es decir, en pocas palabras, que lo que los autores tienen que hacer es seguir el formato que imponen los editores de las revistas científicas.

Fig. 2 - Citing Medicine sobre las citas intertextuales

(c)SafeCreative *1703161158953 (2022 2212192893775)